Bien sea a través de la universidad o también gracias a algún curso que estés haciendo o a la formación profesional, la posibilidad de hacer prácticas en empresas es vital para cualquier estudiante, pues se convierte en una oportunidad importante para conocer el mundo empresarial en un entorno real y así poder poner en práctica todo lo aprendido durante la formación teórica.
Las prácticas son esa primera toma de contacto con una empresa donde tocará ponerse las pilas para hacerlo bien; hay que ser capaz de demostrar que la parte teórica está clara y que ahora llega el momento de hacerla efectiva. La empresa la puedes buscar a través de la universidad o del centro de estudios correspondiente, que se encarga de distribuir a sus alumnos por las organizaciones con las que tiene suscritos convenios, o la puedes buscar por tu cuenta enviado un currículum y ofreciendo tus servicios.
Se trata de un trabajo temporal que suele estar remunerado aunque en ocasiones no lo está, dependerá de cada oferta, se puede compatibilizar con los estudios en caso de que estos no haya concluido y un profesor y una persona de la empresa se encarga de tutorizar el proceso para que el aprovechamiento sea máximo.
Durante este tiempo, adquirirás experiencia profesional, que será importante a la hora de acceder a un empleo futuro; sabrás desenvolverte en equipos de trabajo y habrás desarrollado habilidades que tal vez aún desconocías que tenías. Además, puede suceder que, una vez terminado el periodo de prácticas, sea la propia empresa la que te ofrezca un puesto en su organización y se plantee contratarte. Si lo has hecho bien, al fin y al cabo, estará apostando por una persona que conocen y que saben que responden adecuadamente.
Asimismo, adquirirás independencia y autonomía de cara a desempeñar un trabajo, pues este periodo será muy importante para saber cómo se trabaja en el mundo empresarial real; por otro lado, tu currículum empezará a crearse pues será un punto a incluir, una experiencia más que hablará de tus ganas de superarte y de estar siempre aprendiendo y creciendo. Conocerás gente con la que crear posibles contactos profesionales en un futuro, pues todo cuenta y vivir una temporada en un entorno empresarial te será muy útil, en muchos sentidos, cuando termines la carrera. También descubrirás qué puede esperar de ti un jefe, unos compañeros, y a saber desenvolverte con ellos, el primer trabajo nunca es sencillo al principio y siempre hay dudas, haber hecho unas prácticas te quitará miedos iniciales y ganarás en seguridad, autoconocimiento y confianza.
