Las vacaciones de Navidad están a punto de comenzar y el parón de clases puede afectar a nuestras rutinas de estudio. Es probable que a la vuelta tengas cercanos los exámenes de febrero y, por eso, es importante mantener ciertos hábitos para que el regreso no sea excesivamente duro y nos cueste retomar nuestro día a día frente a los libros y los apuntes.
No obstante, las vacaciones están para descansar, por lo que deberás encontrar el punto de equilibrio para que desconectes pero sin olvidarte del todo de tu tarea académica, pues son unos días que también puedes aprovechar para ponerte al día con las materias y dedicarle unas cuantas horas que repercutirán después en las pruebas a las que te debas enfrentar cuando vuelvas a clase.
La Navidad son días de ajetreo, comidas familiares, reencuentros con amigos que hace un montón de tiempo que no ves… Eso has de vivirlo y disfrutarlo al máximo. Pero, una vez hayan pasado los días de más estrés y ya esté la cosa más calmada, llegará el momento de dedicar ciertas horas de tu día al estudio. Sólo así conseguirás regresar sin haber perdido del todo la rutina y esto hará que te cueste menos volver a sentarte frente a tus apuntes. Además es que si tienes exámenes no te quedará más remedio que hacerlo, tendrás días completos para aprovechar y estudiar todo aquello que, a la vuelta, deberás demostrar en la correspondiente prueba.
Crea tu rutina en un sitio nuevo
Si normalmente estudias fuera y pasas estos días en tu casa, deberás crear un entorno favorable para el estudio, que no será el tuyo habitual. Hazte con un lugar tranquilo y cómodo para estudiar, con una buena iluminación natural siempre que sea posible. Y diseña un horario, con el tiempo que dedicarás a cada asignatura, con los días a la semana que te vas a poner a ello, y calcula que te dé tiempo para cumplir los objetivos que te marques al comienzo de tus vacaciones; puedes dedicar la mañana al estudio, por ejemplo, y la tarde a tomar algo con tus amigos, para repartir el tiempo de manera que encuentres espacio para tus apuntes y también para tu vida social.
Aprovecha estas jornadas para poner al día el trabajo atrasado y repasar tu planning de estudio para que cuando llegue el momento de volver tengas claro qué te queda por estudiar y qué debes repasar porque ya lo has memorizado durante estos días.
