Compaginar estudios y trabajo es posible si te organizas bien. Pueden darse dos supuestos: que estés estudiando y necesites un dinero extra y decidas ponerte a trabajar los fines de semana, o cuando puedas, o que estés trabajando y tomes la decisión de reciclarte o darle un empujón a tu carrera profesional formándote y aportando nuevos conocimientos a tu currículum. Vamos a ver algunos consejos que te pueden ayudar a no desbordarte si trabajas y estudias al mismo tiempo.
- La planificación es imprescindible. Debes saber las horas con las que cuentas para cada cosa y aprovecharlas lo mejor posible. Elabora un calendario con tu horario de trabajo y tu horario para estudiar, si haces formación online debes ser todavía más concienzudo y responsable, si vas a clases presenciales el horario te vendrá marcado y sobre ello deberás organizarte.
- Organización de semana en semana. Cuando planifiques y organices tu tiempo debes establecer objetivos concretos y a corto plazo. Es decir, diseña tu calendario de semana en semana para saber qué has de hacer cada día, en qué momento y cuánto tiempo dedicarás a ello. Divide en pequeñas metas a alcanzar y será mucho fácil llegar hasta ellas.
- Concentración. Muy importante, también, que el tiempo que dediques a estudiar estés centrado en eso al 100%. Nada de móvil ni distracciones, deja las redes sociales a un lado por un rato (no pasa nada, ¡de verdad!) y aprovecha al máximo ese rato que tienes para ponerte delante de tus apuntes. Porque si llevas ocho horas trabajando quizá no sea mucho y tu cabeza esté cansada, pero si sabes sacarle todo el jugo al tiempo que estés, por poquito que sea, estará bien aprovechado.
- Fuera bloqueos y arriba la motivación. Puede ocurrir que termines la semana agotado de estudiar y te toque enfrentarte al trabajo del fin de semana, o que llegues muy cansado de todo un día de trabajo y lo que menos te apetezca sea sentarte frente a un libro, apuntes o frente a tu campus virtual si haces formación online. Es comprensible, pero no debes dejar que te gane la apatía o el desánimo. Ten confianza, sabes que vas a poder con ello, no te derrumbes ni pierdas el tiempo con lamentaciones y quejándote. Es lo que toca, por decisión propia o por cierta necesidad, así que a por todas.
- Es fundamental que respetes tu tiempo de descanso y tus horas de sueño. No podrás con todo si no repones fuerzas y te llenas de energía para afrontar tus largas jornadas de trabajo y estudio.
