Una correcta gestión del tiempo redunda siempre en mejores resultados. Incrementa la productividad y, en consecuencia, nos lleva a obtener aquello que buscamos de una manera más eficiente. Tanto en el estudio como en el trabajo. Repasamos 7 consejos para gestionarlo de una forma más adecuada.
- Planificación. Sobre ello girará la correcta gestión de nuestro tiempo, por lo que dedicarle unos minutos debe ser primordial. Deberemos ser capaces de planificar qué hacer en qué momento, trazarnos objetivos concretos, metas a las que llegar, para conseguir hacerlo de la mejor manera posible. Si no sabemos a dónde vamos será complicado que sepamos qué camino coger.
- Desconexión. Dentro de una adecuada gestión de tu tiempo debes incluir momentos para desconectar. Es imprescindible detener el ritmo, reponer energías y poder continuar. Por eso, debes dedicarte tiempo a ti, a tu familia, a hacer ejercicio, a tus amigos, tus aficiones, tu sofá. Pero no “el rato que te quede libre” si no ya planificar dentro de tu rutina este tiempo para parar.
- Dividir lo grande en pequeño. Si tienes un gran trabajo entre manos, lo mismo si hablamos del estudio, por ejemplo, muchos temas para un examen, debes desfragmentar todo lo que tienes que hacer e ir haciéndolo por pasos realistas y fáciles de cumplir, con un horario para cada uno de ellos y así, primero, disminuirás la sensación de agobio que da querer abarcar algo tan grande y, segundo, lograrás hacerlo mejor si lo separas en partes.
- Pon límites. En algún momento tienes que parar. Es necesario aprender a decir que no, saber delegar, saber cumplir los horarios que te hayas marcado. Porque a veces no por seguir más rato del que deberías lo estás haciendo mejor, igual estás menos concentrado y más cansado, rindes menos y encima pierdes tiempo valioso…
- Prioriza. Es importante priorizar tareas, incluso haciendo una lista de las cosas que tienes que hacer por orden de importancia. Sé realista. Tú te conoces mejor que nadie para saber cuánto tiempo te llevará estudiarte el tema o hacer ese trabajo que debes entregar.
- Descansa. El descanso es fundamental para tu rendimiento. Si duermes entre seis y ocho horas al día conseguirás estar con más energía, pensarás con más claridad y rendirás mejor.
- Y si, por lo que sea, no has podido cumplir los objetivos marcados en tu lista, no pasa nada, no te agobies, vuelve a planificar tu tiempo y reasigna horas y tareas con lo que te queda por hacer, pero no lo dejes al libre albedrío para “cuando puedas” porque seguramente nunca “podrás”. Siempre pueden surgir imprevistos y los debes tener también en cuenta en tu gestión del tiempo.
