Entre las diferentes tipologías de becas que existen están aquellas que sirven para tener una primera toma de contacto con la empresa. Es el apasionante mundo del becario, por el que todos hemos pasado y que nos ayuda a introducirnos en el mercado de trabajo haciendo prácticas durante unos meses y quizá nos ayuden a abrirnos las puertas a un posible empleo. Vamos a ver algunas recomendaciones para ese primer día como becario.
- Ante todo, tranquilidad. Es fácil decirlo, ¿verdad? y seguramente estarás nervioso, pero intenta llegar lo más relajado posible y no le des más importancia que la que tiene. Algún día tenía que ser el primero, ha sido éste, pues disfrútalo. Todos sabrán que es tu primer día y seguramente no habrá nada de lo que puedas decir o hacer durante esa jornada que marque tu carrera profesional. Escucha todas las explicaciones e intenta no agobiarte porque es normal recibir mucha información de golpe. Ya verás como todo sigue su curso conforme avanzan los días.
- La actitud lo es todo. Deberás ser proactivo, no interrumpir a quien te esté explicando, si no mostrar interés por aquello que te están contando ese primer día a través de una escucha activa, siempre desde la humildad y con una sonrisa en la cara. Pregunta todo aquello sobre lo que tengas dudas antes de meter la pata por hacerlo sin saber. Es tu primer día, todo el mundo lo comprenderá. Relaciónate con tus futuros compañeros en la pausa para el café y sé alegre y confiado, aunque siempre alerta.
- Demuestra que sabes trabajar en equipo y que tienes iniciativa. No hace falta que parezca que lo sabes todo o que te creas superior, recuerda que es tu primera toma de contacto con el mundo laboral, y cuando esto ocurre, realmente sabemos bastante poco…
- Recuerda que atrás ha quedado el mundo universitario, por lo que ahora debes cumplir unos horarios, establecer unas rutinas y ser la mejor versión de ti. Puede que no sea el trabajo definitivo de tu vida pero ¿quién sabe? Hay quien comienza como becario y termina con un contrato estable. Sea como fuere, hay que hacerlo bien.
- La vestimenta, aunque parezca algo más secundario, es uno de los principales quebraderos de cabeza del primer día. Como habrás visitado la empresa en alguna entrevista previa, seguramente te hayas podido fijar en el estilo de la gente con la que compartirás ahora trabajo. Si la organización es formal, deberás adecuarte a ello. El primer día es mejor pecar de ir arreglado que pasarte de informal.
