La pereza es esa gran losa que en ocasiones se coloca sobre nuestra espalda y nos hace detenernos. Nos deja sin fuerza, sin motivación. Se quitan las ganas de ponernos frente a los apuntes y cualquier cosa que nos aleje de ellos nos resulta bienvenida. Pero esto no puede seguir así, ha llegado el momento de vencer a la pereza y con los consejos que te traemos hoy lo vas a conseguir.
- Muévete, y hazlo con decisión. Si estás sumergido en una inercia de desgana y de falta de productividad ha llegado el momento de dar un paso para superarlo. Puedes empezar, por ejemplo, ordenado tu lugar de estudio y dejándolo perfecto para sentarte a trabajar con más ganas.
- Establece metas realistas, pequeñas, delimitadas en el tiempo. Nada de grandes propósitos que te hagan sentirte sin fuerza para alcanzarlos. Debes desfragmentar y así seguro que consigues concentrarte a fondo en la tarea que tienes entre manos y rendir mucho mejor. La superación de ese reto supondrá todo un estímulo para seguir y avanzar, y así conseguirás ganar la batalla a la pereza.
- A veces nos llenamos de excusas para justificar nuestra pereza cuando el único problema radica en nosotros. Deshazte de esos pensamientos victimistas y derrotistas y pasa a la acción. Si no lo haces tú te aseguro que nadie lo hará por ti. Y si quieres aprobar, pasar de curso o sacar una matrícula de honor tendrás que poner de tu parte.
- Busca recompensas. Quizá el hecho de sentarte a estudiar un tema cuando el calor empieza a apretar no es lo que más te apetece, pero sabes que tienes que hacerlo… Piensa que, en cuanto termines, te vas a regalar un riquísimo helado o te darás un baño en la piscina. ¿A que apetece más?
- La pereza se nutre de la procrastinación, que es esa capacidad tan grande que tenemos en muchas ocasiones de aplazar una situación o actividad que tenemos que hacer, sustituyéndola por otra cosa menos importante pero que nos resulta más agradable. Y cuanto más lo dilatemos en el tiempo más pereza nos dará, y entraremos en un círculo vicioso… Rómpelo antes de empezar.
- Practica deporte. ¡Es bueno para todo! Y aunque pueda parecer un poco contradictorio, ya que se supone que no tenemos ganas de nada cuando estamos perezosos, el movimiento dará energía a nuestro cuerpo y a nuestra mente, que se activará, y querrá más, y así conseguiremos permanecer mucho más activos.